miércoles, 6 de febrero de 2019

Desbordamiento. Y qué y qué.

La primera mala noticia es que hoy me tendré que quedar en Iquique, cuando lo que yo quería era ir al interior o incluso empezar a moverme hacia el altiplano. Son las 9:30 y las salidas (razonables) han sido antes de las 8:30. La otra noticia es que los desbordamientos de ríos e inundaciones se propagan, ya no solo no se puede llegar a Arica, ahora se hace difícil llegar al altiplano. Cambio de planes. A ver qué se puede hacer en Iquique. Me lío a hablar con unos y con otros y recompongo el día.

Paseo en barquito. Aunque repetido, siempre es una buena forma de pasar el rato y conocer gente. Aquí casi todos los turistas son chilenos, del sur. No les conoceré en su entorno natural pero al menos no son guiris (como yo) y podré acercarme un poco a su modo de entender la vida. Las explicaciones en el barco están muy bien hechas, se refieren a los grandes barcos de transporte que aquí atracan, los miles de miles de toneladas que transportan, lo chinos que son, la zona franca en el puerto (una de las más notables del pacífico sur, donde se puede encontrar de todo todo, también un susto, mejor no acercarse dicen), la industria pesquera, la guerra contra los peruanos a finales del XIX, el buque esmeralda, que, no dejen de visitar….dicen.
La primera mala noticia es que hoy me tendré que quedar en Iquique, cuando lo que yo quería era ir al interior o incluso empezar a moverme hacia el altiplano. Son las 9:30 y las salidas (razonables) han sido antes de las 8:30. La otra noticia es que los desbordamientos de ríos e inundaciones se propagan, ya no solo no se puede llegar a Arica, ahora se hace difícil llegar al altiplano. Cambio de planes. A ver qué se puede hacer en Iquique. Me lío a hablar con unos y con otros y recompongo el día.

Paseo en barquito. Aunque repetido, siempre es una buena forma de pasar el rato y conocer gente. Aquí casi todos los turistas son chilenos, del sur. No les conoceré en su entorno natural pero al menos no son guiris (como yo) y podré acercarme un poco a su modo de entender la vida. Las explicaciones en el barco están muy bien hechas, se refieren a los grandes barcos de transporte que aquí atracan, los miles de miles de toneladas que transportan, lo chinos que son, la zona franca en el puerto (una de las más notables del pacífico sur, donde se puede encontrar de todo todo, también un susto, mejor no acercarse dicen), la industria pesquera, la guerra contra los peruanos a finales del XIX, el buque esmeralda, que, no dejen de visitar….dicen.


Miles de toneladas

También vi lobos de mar














Como en un agradable restaurante, “El Wagon”, como un pescado riquísimo, “blanquillo”, pescado blanco donde los haya. No me resisto a fotocopiar la carta, por si el que esto lee lo hace a mediodía, para que sienta envidia.


Luego de comer me voy al Museo Regional, solo me atraen dos cosas y son en las que me concentro. La cultura chinchorro (sí, como el juego de cartas), de la que se pueden ver horribles cuerpos momificados y anteriores a los egipcios.Y la hemeroteca, que más bien debiera llamarse “taparacateca” porque la verdad, solo hay un periódico, el “Tarapacá”. No se imaginen, mis hijos, una gran sala con estanterías móviles y ordenadores por doquier, esto es un cuarto oscuro con miles de periódicos amontonados por el suelo y otros tantos encuadernados y mal situados en unas estanterías birriosas. Pero hay una luz que alumbra el zulo: el “hemerotecario”, si es que la palabra  existe. Don Guillermo Ross-Murray. Puro chileno, su apellido gringo le salvó de la dictadura en más de una ocasión según cuenta. Salió huyendo de Antofagasta en el 73 cuando le mataron a un buen amigo. Estaba en la universidad, dice que con Victor Jara. Bajito, barrigudo, escucha y cuando acabas él habla, podrías estar horas hablando y volver y volver. Pero tiene muchos clientes, este Don Guillermo. Entra una joven gaditana y pregunta por el 39, es que estoy haciendo una tesis sobre Franco y Pinochet…a ver quién era peor. Don Guillermo dice que el suyo. La chica está en Santiago por unos meses con una beca. Está acabando Periodismo y Audiovisuales, dice que lo que de verdad la gusta es esto último. Pues en vaya en la que se ha metido con Don Augusto y Don Francisco.

Octubre del 39

Neruda








Frente al Museo una exposición más que interesante sobre Neruda. Tendré que hablar de él, pero no es este el momento. Vivió por y para el amor. Dijo que no concebía hacerlo de otra manera. Tiene versos inolvidables. Y unas memorias irrepetibles. Ahí quedan unas líneas del autor.










Me voy a una pequeña playa vacía, creo que es la única en muchos kilómetros a la redonda. Por aquello de estar junto al mar en una cierta calma. Son cuatro y con ellos hablo. Un joven al que le ha picado una medusa reconoce mi acento y me dice que su papá está en Murcia, digo que porqué no se ha ido con él, obvio, me dice, estoy viviendo dos meses de gloria, en la casita solito, bueno, con estos amigos… Está estudiando algo relacionado con los tatuajes, presume del que tiene en la pierna. No olvide, me dice, explicar bien clarito: religión y ciencia van de la mano, siempre, Darwin y Jesús, lo uno y su contrario. La próxima, en el brazo derecho, lo tengo claro, me dice, una serpiente, mala, muy mala, me la hago este jueves. No puedo resistirme y le pregunto si ya sabe qué se tatuará en el otro brazo enfrentado a la serpiente.



En la playa solitaria
Darwin y Jesús
De vuelta al hotel oigo noticias alarmantes sobre las inundaciones en el altiplano. Ya se sabe lo mucho que les gusta a los periodistas el hacer noticia, lo sea o no (vease Ciudadano Kane). Y últimamente, con los meteorólogos como aliados de lujo y la ciencia de su parte, no pueden pedir más, la noticia está servida. Lo cierto es que hablo con unos y con otros y todos coinciden en que será cosa de tres días (los que yo no tengo) pero que con las lluvias de altiplano y desbordamiento de caudales, mejor dejarlo. Pregunto incluso a los carabineros, me dice el cabo que por ahora la carretera está abiertita. Cabo que por cierto me habla de Toledo, que qué bonita. Al final no veo claro cómo acercarme a los “casi cuatromiles” y empiezo a replantearme mis próximos días en Chile.


La  bonita calle Baquedano










4 comentarios:

  1. Te imaginas el viaje que estás haciendo en plan mochilero con Antonio y con tu hermano? Se parece mucho al sistema que ha utilizado Antonio en Vietnam , ir improvisando sobre el terreno... la ibais a gozar un montón!!!!

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  2. Recuerdo nuestro viaje a Chile, teníamos que visitar y conocer a tantos familiares de mi madre que olvidamos que estábamos de "luna de miel". Nos escapamos tres días, rumbo Norte, concretamente a Serena. ¡Cómo disfrutamos caminando por ese paseo marítimo interminable! Y de la comida típica de allí, ni te cuento.
    Nos dices que has comido empanada chilena, hecha en Chile, con marisco chileno, con harina chilena, con agua chilena... Déjame decirte que has cometido un terrible error, y es que vas a estar recordando toda tu vida ese sabor, y lo buscarás en otras, en otros lugares, sin encontrarlo. A Pedro le pasó, y lo sigue sufriendo.(ji,ji,ji..)
    ¡Disfrútalo, vívelo, aprende mucho, y cuéntanoslo! Y gracias!!!

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  3. Intriga, intriga...
    Antesdeayer me fui a la cama pensando que te estaban siguiendo o a lo peor, que no volverías a escribir y pidiesen rescate.....y pense, pues lo llevan claro, Lola no suelta un duro...jajaja. Date por muerto.
    Mariscal como te va la aventura, y nosotros aqui a la sopa tonta e imaginando que ya es. Disfrutalo

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  4. Uy...creo que he suplantado a alguien, no era la intención, perdón.

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