domingo, 18 de febrero de 2024

No entiendo tu lengua

Dicen algunos que el origen del nombre de la península en la que me encuentro es Yuk ak katán (“no entiendo tu lengua” en maya). No lo discutiremos.  “Se non ê vero ê ben trovato”. Conquistadores de imaginación desbordante.

Es fácil echar imaginación sobre un mundo tan fascinante como el maya. Si agudizas el oido puedes oír a los locales, sean conductores de carruajes de caballos, sean vendedores de marquesitas o sean meseros charlatanes, contar cosas sobre los mayas con tal firmeza, con tal convicción, con tal desparpajo, que si no reparas en la situación, te lo crees, lo almacenas y llegado el caso lo repites. Que me digan a mi cuántas veces no nos hemos visto en situaciones similares con temas mucho menos jugosos. Y lo repetimos y repetimos, con dos cojones.



Hoy tocaba descanso de mitad de travesía (tercio para ser preciso). Mérida era un buen lugar para patear. La constante pero ligera lluvia durante todo el día no ha sido un problema sino más bien un respiro. Desde la 66 con la 59, que es donde está mi hotel, hasta la 47 con la 60, que es donde empieza el paseo de Montejo, otra ciudad dentro de la ciudad. ¿Se me entiende el tema coordenadas? Es así de sencillo: norte-sur calles impares, este-oeste calles pares (y luego los recovecos, los detalles). Si te pierdes, ni preguntar, andas una cuadra en cualquier sentido y ya sabes dónde estás. No hay nada como viajar. 



Esto no es Mérida, lo juro. Es el paseo de Montejo


Es sí es Mérida. Olvidaos de lo que dicen, es por hacerse una idea de cómo es la ciudad.

https://www.youtube.com/watch?v=r0evNdY4Er4


He entrado a un solo museo, el de la ciudad de Mérida. No vale nada. Me interesaba otro, cerraba el domingo.  Pero cualquier situación sirve para dar vueltas al coco. Había una exposición de vestidos, de una modista, Elena Martínez Bolio, para mi desconocida (también para wikipedia) que hay que ver lo que cosió… Dos fotos para hacerse idea. Por mucho blog que yo escriba el viento acabará con ello; lo de esta afanosa modista ahí está, mi respeto por aquellos que hacen y hacen y hacen bien y dejan hecho. 







Había también una muy pequeña exposición de cuadros sobre rebozos. Me ha gustado una explicación que introducía a la muestra, en los cuadros no he fijado mi atención. No me digan que no es bonito.



Rebozo



Yo me acuso

La tarde ha sido de lectura y de corrección de blog. Pero antes he salido a la terraza a fumar un purito. Al otro lado de la calle, un mendigo tirado en el suelo. Hay tantos, me digo. Pero observo que parece querer moverse o mejor dicho, levantarse, y no puede, estará borracho. Gente pasa a su lado con total indiferencia. Me digo: acabo de fumar y bajo a ayudarle. No me ha dado tiempo. Un coche pequeño ha parado, ha puesto los intermitentes y dos niñas han salido del coche y le han preguntado al mendigo si estaba bien. No hay respuesta. Le agarran de los brazos, se levanta y echa a andar sin decir nada. En ese último momento un señor de los que andaban cerca se acercó a ayudar a las niñas. Me he quedado triste, sin humo.




Mi hotel. Primer piso, terraza esquina y la otra



Sentado en mi terraza est era la vist









2 comentarios:

  1. Gracias Juan Carlos, sigue disfrutando y compartiendo tus aventuras. Un placer leerte.

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  2. Sí, por lo visto hay cientos de dialectos mayas incluso entre ellos no se entienden y eso q desapareció su civilización antes de q llegáramos en el siglo xv… q tal llevas el libro de tu compatriota de aquella época? Disfruta q lo bueno ya lo tienes cerca… la selva, las cascadas, Palenque y Oaxaca😜. De momento aquí en el cine para ver Vemeer a la vuelta tienes Frida Kahlo por si te quedas con ganas, je je. Jorge

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